Los préstamos siempre han sido la opción más buscada para resolver asuntos en los que se requiera una gran suma de dinero. Hoy en día existen miles de opciones de préstamos y cada proveedor ofrece varias alternativas en cuanto a la cantidad y el plazo de pago. Sin embargo no todos los préstamos son iguales entre sí. Hay tipos que se ajustan más a las necesidades del solicitante que otros. Entre los más comunes están los préstamos en línea y los préstamos convencionales. Cada uno tiene una serie de características que hacen que el cliente no sepa cuál es el que mejor le conviene.

Los dos tipos de préstamos tienen algunas similitudes pero también algunas diferencias. Es muy importante que las reconozcas para saber elegir la opción correcta ya sea para emprender  un primer negocio, hacer reparaciones en el hogar o realizar compra de materiales e insumos para una empresa, siempre se busca la manera de obtener un préstamo de manera inmediata y sin tener que estresarse en un banco debido a la burocracia con la que se manejan algunas de estas instituciones. Los préstamos online ahorran todo ese tedio, pero ¿realmente son mejores que los préstamos convencionales?

¿Qué es un préstamo online?

Todo lo que se puede hacer de manera online es para muchos mejor que su versión convencional. Un préstamo online es básicamente un tipo de préstamos de dinero otorgado por una agencia a través de una plataforma web. Todo lo que tienes que hacer es entrar en la página y seleccionar la opción que más te convenga y rellenar un formulario. Así de sencillo, sin tener que salir de tu casa a perder gran parte de tu tiempo en una entidad o agencia bancaria.

Esta opción está siendo muy demandada por clientes que necesitan una cantidad de dinero para gastos minúsculos.

¿Qué es un préstamo convencional?

Los préstamos de dinero convencionales funcionan desde tiempos remotos. Es una operación en la que una entidad financiera o agencia bancaria proporciona una cantidad de dinero que debe ser pagada en cuotas en un plazo establecido.

El proceso consiste en ir a una agencia bancaria o una entidad financiera con una serie de recaudos exigidos por la agencia proveedora. En el último paso, el cliente debe firmar un contrato donde acepta las condiciones del préstamo y con el plazo en el que debe pagar el préstamo solicitado.

Diferencias entre préstamo convencional y préstamo online

Ambos tipos de préstamos de dinero tienen el mismo objetivo de solucionar los problemas financieros de los trabajadores, los empresarios y los comerciantes. Sin embargo hay características que los diferencian el uno del otro.

Préstamo convencional

  • Debe ser tramitado en un banco o una entidad financiera.
  • Exige una lista de papeles como requisito.
  • Debe realizarse de manera presencial. No puede ir otra persona a hacer el trámite por el solicitante.
  • Tiene una cantidad de dinero limitada para prestar.

Préstamo online

  • Se realiza todo el proceso vía internet, sin necesidad de ir a una agencia bancaria.
  • El proceso se realiza de manera digital, sin un prestamista presencial.
  • Se puede elegir el plazo para devolver el préstamo.
  • Tienen un monto máximo a prestar.
  • Funciona las 24 horas al día.

Ventajas y desventajas del préstamo online

La web ha cambiado la manera de realizar trámites importantes y ha facilitado la vida de todo el mundo. Sin embargo, como todo en la vida, tiene sus pros y sus contras:

Ventajas

  • Todo se realiza vía internet, sin necesidad de salir de casa.
  • Tienen un servicio 24/7, es decir, que puedes realizar el trámite siempre que lo necesites.
  • No tienes que firmar una montaña de papeles ni consignar tantos requisitos. Solo ser mayor de edad y tu DNI o pasaporte.
  • La entrega del dinero se realiza en no más de 48 horas.
  • No necesitas ningún aval. Solo un justificativo de ingresos.

Desventajas

  • Tienen montos limitados, así que si necesitas más esta no es la opción más recomendada.
  • El riesgo de estafa.
  • Puedes ser víctima de usura con intereses exorbitantes.

Ventajas y desventajas del préstamo convencional

Los préstamos de dinero convencionales siguen siendo una alternativa a los préstamos en línea. Es por eso que muchos empresarios lo siguen eligiendo.

Ventajas

  • Puedes pedir una cantidad ilimitada de dinero.
  • Las probabilidades de estafa y usura son menores.

Desventajas

  • Tienes que perder mucho tiempo en la oficina de un banco.
  • Exigen más requisitos.
  • Necesitas obligatoriamente un aval, es decir, una persona que pueda cubrir la deuda en caso de que el solicitante no pueda.

Tipos de préstamos convencionales

  • Crédito al consumo: Es un préstamo de corto a mediano plazo que puede ser de 1 a 4 años, con el que se pueden adquirir bienes o pagar servicios.
  • Crédito comercial: Préstamo dirigido a empresas pequeñas o grandes para la adquisición de insumos, cubrir los gastos de la empresa como servicios o para saldar deudas con otras empresas y prestamistas de corto plazo.
  • Crédito hipotecario: Es un préstamo otorgado por el banco o financiera para la adquisición de una propiedad terminada, un terreno, la construcción de viviendas, locales y otros bienes raíces, con garantía de la hipoteca sobre el bien que se ha adquirido o solicitado. Generalmente se hace un contrato para que el bien sea pagado en el mediano o largo plazo que dura entre 8 a 40 años, aunque normalmente es de 20 años.
  • Crédito consolidado: Es un préstamo que acumula todos los otros préstamos que el prestatario está tramitando, en un solo crédito nuevo. Normalmente estos préstamos consolidados son utilizados por quienes los solicitan para pagar una cuota periódica más baja que la suma de las cuotas de todos los préstamos por separado, aun cuando en contraprestación el plazo del crédito y el tipo de interés a aplicar pueden ser prolongados.
  • Crédito personal: Préstamo que el banco o financiera otorga a un individuo, persona natural, y no a persona jurídica, para adquirir cualquier bien mueble que no sea viviendas o propiedades. El plazo del pago a mediano o corto plazo puede durar de 1 a 6 años.
  • Crédito prendario: Cantidad de dinero que el banco o entidad financiera entregan a una persona natural, y no a personas jurídicas para realizar la compra de bienes muebles como autos o equipos para el hogar. Es importante que el elemento sea aprobado por la agencia bancaria o la entidad financiera, la condición es que el bien mueble a comprar quede con una prenda, hasta la deuda esté saldada con el banco o la entidad financiera.
  • Crédito rápido: Es un préstamo que las entidades financieras de capital privado ofrecen, con una baja cuantía y una flexibilidad en los plazos de amortización, lo que lo hace una opción muy buscada sobre todo cuando hay necesidad urgente de liquidez. Para solventarlas, muchas empresas financieras brindan opciones para que sus clientes puedan cubrir sus gastos otorgando la concesión de créditos rápidos. Consisten en créditos minúsculos que deben ser pagados en un corto plazo de tiempo, de manera que no se acumulen los intereses y la deuda sea mayor.
  • Crédito sindicado: Es un crédito de cuantiosas sumas otorgado, en una sola operación, por un conjunto de entidades de financieras, y entre todas se distribuyen los riesgos.
  • Crédito automotriz: Es un crédito dirigido exclusivamente para adquirir un auto. Generalmente se debe solicitar en bancos o en la división de financiamiento de la empresa automotriz en la que se desea comprar el auto. En algunas páginas web se puede encontrar varios tipos de créditos automotrices, entre ellos un crédito automotriz que también incluye  seguro de auto, en caso de imprevistos.
  • Crédito educativo: Es un tipo de préstamo dirigido a los estudiantes para que puedan realizar o culminar sus estudios. Posee una tasa de interés muy baja y un plazo de pago de hasta el doble del tiempo a partir de la fecha en que se entregó el crédito. Los créditos educativos también permiten financiar estudios en el extranjero o viajes de investigación. No es lo mismo que una beca.
  • Microcrédito: Es un crédito con una pequeña suma de dinero. Este tipo de préstamo está más enfocado a personas de bajos recursos, que normalmente no cuentan con bienes para respaldarla, con el fin de que emprenda su propio negocio o implemente en el que ya tiene.
  • Mini crédito: Es un préstamo de una baja suma (de hasta 600 euros) que deben pagarse en un plazo máximo de 30 días, otorgado por las entidades de crédito. La ventaja de estos préstamos es su solicitud eficiente, su rapidez en la aprobación o denegación, pero su desventaja es que son mucho más caros que los préstamos otorgados por los bancos.
  • Crédito empresarial: Es un financiamiento que tiene el fin de solventar deudas de una compañía. Generalmente es proporcionado en grandes sumas de dinero para que la empresa pueda crecer.

Recomendaciones a la hora de elegir un préstamo

Los préstamos de dinero, tanto los convencionales como los online, ofrecen grandes beneficios a los clientes. Sin embargo no todos se adecúan a todas las necesidades. Para elegir el adecuado debes tomar en cuenta tu situación. Conviene que sigas estos sencillos tips para que no termines arrepintiéndote de haber pedido el préstamo.

  1. Analiza bien tu situación: Bien sea que tengas una empresa o negocio, necesites comprar materiales para tu hogar, quieras comprar un auto o solventar unos gastos minúsculos, es importante que lo tengas en cuenta para saber cuál es el tipo de crédito más indicado para ti. Así no tendrás problemas si te prestan más o menos dinero del que necesitas.
  2. Elige una entidad financiera reconocida: También puede ser el banco donde tienes tu cuenta corriente, siempre y cuando esté reconocido por un organismo o asociación de entidades financieras. De esta manera tendrás la seguridad de no ser víctima de usura o podrás hacer reclamos en caso de que esto suceda.
  3. No te dejes engañar con promociones: Muchas empresas se valen de promociones y ofertas engañosas para cobrar unos intereses exorbitantes. Una empresa sería nunca realiza ofertas que suenen atractivas para los clientes.
  4. Si estás solicitando un préstamo online, sé cuidadoso: Comprueba la confiabilidad de la página, verificando los elementos de seguridad en el navegador y elige una página de la cual tengas buenas referencias. Si conoces a alguien que tenga experiencia pídele que te asesore.
  5. Lee con detenimiento las condiciones del contrato antes de firmar: Firmar un contrato sin leerlo bien es como echarse la soga al cuello. Asegúrate de que no tenga escrito nada que te parezca sospechoso. De ser así, desiste de firmarlo y elige otra empresa.
  6. No solicites préstamos online si tienes escasos recursos: Para estos casos es preferible ir al banco y solicitar alguno de los microcréditos que este ofrezca. Dependiendo del banco puede haber varios tipos con tasas de interés asequibles. Los préstamos online pueden ofrecer opciones cómodas y largos plazos de pago, pero los intereses pueden ser más altos que los de los bancos.

¿Cómo reconocer un préstamo online fraudulento?

La tecnología también es un vehículo de timos y estafas para beneficio del estafador. Saber reconocerlos puede ayudarte a ti y a tus conocidos a salvar su dinero de una pérdida difícil de compensar. Las estafas web tienen una serie de características que con solo verlas ya es motivo de desconfianza.

  1. El correo tiene el nombre de una persona que generalmente dice ser extranjera.
  2. El correo de la persona tiene un dominio gratuito (como Hotmail, Gmail, Outlook).
  3. Te piden una suma de dinero supuestamente como garantía y te dicen que sin eso no te pueden dar el préstamo.
  4. Te ofrecen una cantidad muy atractiva de dinero.
  5. Piden unos intereses muy bajos.
  6. El dinero que piden debe ser transferido a través de plataformas como Western Unión o Money Gram a nombre de una supuesta persona que no es la que envía el correo.
  7. El correo está mal redactado o con faltas de ortografía.
  8. El correo no tiene una foto de perfil.
  9. Cuando envías el dinero solicitado ponen pretextos para pedirte más como gastos de seguro.